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El amor, madre, a la patria
No es el amor ridículo a la tierra
Ni a la hierba que pisan nuestras plantas.
Es el odio invencible a quien la oprime.
Es el rencor eterno a quien la ataca.

Jose Martí

10/23/2011

EL MÁRTIR GHADDAFI Y NUESTRA LUCHA POR LA LIBERTAD


En su última reflexión titulada “Las Dos Venezuela”, el comandante Fidel cita al Apóstol José Martí

“… impedir a tiempo con la independencia de Cuba que se extiendan por las Antillas los Estados Unidos y caigan, con esa fuerza más, sobre nuestras tierras de América. Cuanto hice hasta hoy, y haré, es para eso”

Empezamos esta reflexión con las palabras del Apóstol y Mártir José Martí y de esta forma, en el contexto de nuestra lucha por la independencia, dedicar algunas palabras al caso de otro líder ASESINADO y MARTIRIZADO: MUAMMAR AL-GHADDAFI.

Con la destrucción y recolonización de Libia, PRINCIPALMENTE PERPETRADO POR EL NOROCCIDENTE, consistiendo de sus miembros criminales prominentes como lo son Holanda, Estados Unidos e Inglaterra, dicha organización criminal cumple una vez más con su genética maligna, asesina y genocida. La malignidad, para parafrasear al comandante surinameño Marcel Kross, está entretejida en su ADN.

Para los revolucionarios toda lucha anti-colonial, anti-ocupación y anti-imperialista EN EL MUNDO, ES TAMBIEN SU LUCHA.

Pues nosotros también sentimos la destrucción de Libia. Nosotros también sentimos el dolor libio. Somos Libios.

Lo demás es traición, es vende-patria, es contra-patria, es anti-patria. No existen medias tintas. La neutralidad no existe. La neutralidad es complicidad.

El asesinato de Ghaddafi y la ocupación KKKolonial con la PROMINENTE PARTICIPACIÓN HOLANDESA, ES TAMBIÉN NUESTRA DERROTA.

CADA DERROTA REVOLUCIONARIO EN EL MUNDO, ES TAMBIEN NUESTRA DERROTA. CADA VICTORIA EN LAS BATALLAS POR EL MUNDO CONTRA EL IMPERIO DE LOS HOLANDESES, YANKIS E INGLESES, ES TAMBIEN NUESTRA VICTORIA !!!

Las luchas libertadoras en el mundo son como el sistema físico de los vasos comunicantes.

Nuestra lucha independentista antillana por la liberación de las llamadas Antillas Holandesas (Curazao, Aruba, Bonaire, San Martín, San Eustacio y Saba), por lo tanto, NO SOLAMENTE SE LIBERA para así POR FIN lograr nuestra libertad, nuestra independencia y nuestra soberanía, sino TAMBIEN para liberar y salvaguardar LA PATRIA GRANDE contra siglos den crímenes, asesinatos, genocidios y explotación.

Todo lo que nuestros líderes y nuestros mártires EN EL MUNDO TODO han hecho, todas las gestiones liberadoras y reivindicadoras y todo lo que harán en futuras generaciones –porque el hombre siempre luchará contra la opresión y la injusticia– es para hacer justicia el derecho fundamental que todo pueblo reclama, que todo pueblo desea desde lo más profundo de sus cauces: Vivir en libertad, vivir en paz para poder lograr «la mayor suma de felicidad posible» (Simón Bolívar, Discurso de Angostura).

El Mártir Ghaddafi cabalmente estaba cumpliendo con la meta de hacer feliz a su pueblo. Y no solamente a su pueblo, sino también a sus hermanos de La África Grande.

Nuestra lucha por la independencia debe servir entonces dos propósitos:

1. Desocupar y liberar nuestra casa antillana.
2. Frenar, Neutralizar y hacer Retroceder la agresión KKKolonial holandesa y yanqui.

Las bases militares HOLANDESAS y yanquis en Curazao y Aruba en el umbral de la Venezuela Bolivariana, son de inminente y directo peligro. Sirven el propósito imperial en la guerra contra la Patria Grande y particularmente Venezuela. Los HOLANDESES juegan un PAPEL PROMINENTE en la guerra contra Venezuela. ¡Que nadie se equivoque!

Que las palabras de José Martí, obviamente adaptadas a nuestra situación NAZI KKKolonial holandesa, sean nuestra consigna:

Con la consagración de la independencia de Las Antillas, impedir que la dominación, explotación y ocupación holandesa y yanqui siga en las Antillas y así impedir que esa fuerza KKKolonial destructora y genocida siga por las tierras de la Patria Grande, el Caribe y Latino América. Cuanto hice hasta hoy, y haré, es para eso.

Nuestro sagrado propósito de lograr nuestra libertad, al mismo tiempo sirve el propósito de frenar a los holandeses ladrones y asesinos y sus amos yanquis en su rastro criminal genocida a través de los siglos.

Obedeciendo al primer propósito, nosotros concretizamos el segundo propósito. Al concretizar el segundo propósito, nosotros servimos al primer propósito: Obtener la seguridad, paz, justicia, bienestar y felicidad de nuestra casa, de nuestros hijos y nietos, de sus hijos y nietos.

Hasta el último suspiro.

PB



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